sábado, 7 de marzo de 2009

7 de Marzo

Muchos me habéis dicho por email que hace mucho que no sabéis de mi, y es que me resulta muy difícil pasar mucho tiempo delante de un ordenador para pasar los escritos que tengo a mano, pero sabed (para alegría o desgracia) que sigo escribiendo a diario, por lo que habrá una buena ración de vivencias cuando tenga mas tiempo (seguramente no pueda pasarlo todo hasta que vuelva). Aquí en Debre Markos la verdad es que estoy mucho mejor, pues hay muchos menos voluntarios que en Addis y la superiora, sister Ignacia, es una misionera muy activa y simpática, pues cuenta mucho conmigo para todas las tareas del centro. Estuve como único voluntario hasta hace cuatro días que vinieron tres checos: una pareja de novios que se queda hasta el lunes (pues siguen el camino hacia Gonder) y una señora algo mayor que se queda aquí mas tiempo. Ahora me dispongo a hacer un muy breve resumen de mi estancia aquí:
Los primeros días nada más llegar coincidía que era fin de semana, por lo que al ser días mas tranquilos, no tuve mucho trabajo; me sirvieron para adaptarme a mi nueva residencia y lugar de trabajo y tener un agradable contacto con las celebraciones eucarísticas por el rito Gezz y el buen ambiente de oración de las hermanas de aquí. La verdad es que este último punto es con el que más contento estoy, pues las cuatro misioneras tienen mucha atención conmigo y me dejan participar en prácticamente todas sus actividades, por lo que estoy sacando mucho fruto por esa parte, que realmente fue por la que principalmente vine a Etiopia.
En cuanto al trabajo diario, decir que esta semana he tenido el gran privilegio de poder acompañar a las hermanas "en busca de pobres" a los que ayudar en las zonas más miserables de Debre Markos; no tengo palabras suficientes para describir la riqueza que me han aportado estas experiencias, creo que os o podéis imaginar. Otros dos días estuve ayudando con el reparto de comida a familias de la cuidad que venían a ser ayudadas a la casa de las misioneras, y uno de los días el enfermero me dejo "hacer dressing", es decir, curar y vendar las impresionantes heridas con las que viene la gente en todas las zonas de su cuerpo. Todas estas actividades se suelen realizar por las mañanas, que es el momento del día de más trabajo; por las tardes suelo estar jugando o haciendo cualquier tipo de tarea con los niños dentro del propio centro.
Bueno, como os he dicho, esto no es más que un resumen puramente descriptivo; quedan pendientes muchos detalles y reflexiones dignos de tener en cuenta que contaré a aquellos que les interese cuando físicamente pueda. Aprovecho para mencionar a todos los que me mandáis e-mails pues no imagináis la fuerza que me dan y la ilusión que me hacen, realmente noto que estáis acompañándome en esta aventura y nunca dejaré de agradecéroslo. Por favor, no dejéis de mandármelos, sólo os pido paciencia, los responderé lo antes que pueda.
Un gran saludo etiope.

2 comentarios:

  1. wei! que bien que reanudaste el blog! Desde donde escribes????

    Me alegro que te siga aportanto tanto esta experiencia. Tiene pinta de que te va a decir mucho interiormente.

    Por aquí bien... ya sabes... ritmo occidental, jejeje... mucho trabajo y mucha fiesta los findes... así que no te has perdido mucho.

    Un abrazo gonzo, cuidate.

    tito

    ResponderEliminar
  2. Hola Gonzo! qtl? me alegra poder leer que estás disfrutando mucho de tu viaje. Sin duda es algo que te va a marcar mucho y formar personalmente. Espero que exprimas cada segundo que pasas allí.
    Aquí tienes unos cuantos seguidores encantados de poder leer cada una de tus experiencias allí.

    Un besote,

    Ari

    ResponderEliminar